Autor: Main
Traducción y Edición al Inglés: Kaoto
Traducción y Edición al Español: BlackCyan

Capítulo 70: Ser Convocado Después de Renacer

“¿Supongo que todo está arreglado ahora?”

Al ver que Al y Feim ya no tenían voluntad de luchar, Klaus le preguntó a Loren, pero Loren no dijo nada y se encogió de hombros.

Él fue capaz de someterlos solo con la coacción, pero sintió que se debió principalmente a Shayna, quien estaba inflando su pecho con orgullo en el rabillo del ojo.

Era difícil pensar que ellos, como futuros aventureros, a pesar de ser estudiantes actualmente, perderían la voluntad de luchar de un vistazo.

“Hay que atarlos con una cuerda o algo por ahora. Será problemático si comienzan a actuar de nuevo”.

“Te refieres a todos ellos, ¿verdad?”

Klaus lanzó una mirada lastimosa hacia Ain y Cloud, que estaban en el suelo.

Los dos estaban en mal estado, ya que no parecían estar relacionados con este asunto, pero fueron utilizados por Al y terminaron siendo noqueados por Loren.

Klaus se preguntó si realmente necesitaban atarlos, pero ya que no estaban seguros de si todavía estaban bajo la influencia de << Hipnosis >> o no, era necesario neutralizarlos.

Klaus lo sabía muy bien, pero no podía evitar sentirse mal por ellos.

“A todos ellos. Es desafortunado para ellos, pero vamos a ponerlo como una mala gestión de sus compañeros”.

“De acuerdo”.

Klaus asintió y comenzó a atar a Feim y Al con la cuerda que Ange había sacado de su bolso.

“¿Qué debemos hacer ahora?”

Lapis, mirando el proceso, le preguntó a Loren.

“Bueno...supongo que volver a la superficie usando la puerta de transporte, ¿verdad?”

“¿Qué debemos hacer al respecto?”

Loren se giró hacia donde estaba señalando Lapis, y su rostro se endureció al ver lo que había allí.

A la vista estaba la caja que Al había dejado caer, que supuestamente tenía sellado a un dios maligno dentro.

La caja, que había sido una caja de metal normal cuando Al la estaba sujetando, estaba tendida en el suelo, pero algunos de los diseños en su superficie comenzaron a emitir una luz púrpura misteriosa.

“Oh, vamos... No me digas que...”

“Por alguna razón, estoy de acuerdo con lo que estás pensando”.

Ya se demostró que la anormalidad de la mazmorra, que supuestamente fue causada por el cercano renacimiento del dios maligno, y lo que Al había estado planeando no tenía relación.

En ese caso, el hecho de que Al ya hubiera sido detenido, sin más voluntad de luchar, era un problema aparte del renacimiento del dios maligno.

“¿¡No me digas que va a revivir ahora mismo!?”

“Tan mal momento”.

Loren comenzó a entrar en pánico, pero, por otro lado, Lapis estaba muy tranquila.

Por supuesto, no era porque ella tenía una manera de lidiar con lo que estaba sucediendo ante ellos.

“¿¡Q-Qué va a pasar!?”

Cuando Parme, que había estado observando todo en silencio, gritó consternada, la caja en el piso comenzó a brillar más intensamente y empezó a emitir destellos de luz púrpura, y cualquiera podía ver que no era normal.

“¡Ah, el dios maligno está reviviendo para salvarme en mi tiempo de angustia!”

“Klaus, dale una bofetada y cállalo, ¿quieres?”

Cuando Loren le dijo, al ver a Al llorar, emocionarse y moverse en el suelo como un gusano, Klaus suspiró y lo golpeó en la parte posterior de la cabeza.

Al perdió la consciencia por un segundo, pero rápidamente se recuperó y empujó a Klaus, y comenzó a gatear hacia la caja, brillando con una luz intensa.

“Ahora, ¡préstame tu poder!”

“Cállate y quédate dormido”.

Loren dijo con el ceño fruncido y dejó caer su talón sobre la parte posterior de la cabeza de Al.

Junto con un sonido muy contundente, el golpe pareció noquearlo, ya que el cuerpo de Al se estremeció por última vez antes de que dejara de moverse.

Todos los demás pensaron que estaba muerto, pero a Loren no parecía importarle, ya que le dio una patada y se volvió hacia la caja.

“¿Qué hacemos al respecto?”

“No creo que haya mucho que podamos hacer en este momento”.

Como Lapis dijo eso en un tono de rendición, Loren pensó por un momento y le dijo a ella como si el pensamiento hubiera aparecido en su cabeza.

“¿Qué tal si fingimos que no vimos nada y regresamos a la superficie?”

“Creo que es un poco tarde para eso”.

Klaus y los demás le dieron una mirada aburrida a la despiadada propuesta de Loren.

Lapis dijo en voz alta mientras continuaba mirando la caja con gran interés.

“Creo que algo está saliendo”.

“Tenía miedo de que fuera algo así”.

Nada le había salido bien a Loren desde que dejó de ser mercenario.

Había comenzado a reconocer su mala suerte, por lo que ya tenía la vaga sensación de que no iba a poder simplemente alejarse de ella como si tirara comida podrida.

“Está viniendo. Prepárense, todos”.

Si confiaban en lo que habían oído sobre lo que había en la caja, significaba que lo que estaba saliendo era un dios maligno.

Si presenciaban algo como eso manifestándose en el mundo actual, quién sabía qué más podría pasar.

Mientras se preparaban ante la advertencia de Lapis, la caja en el suelo comenzó a emitir la luz más brillante hasta el momento.

Loren mantuvo sus ojos en la caja, y dentro de la luz cegadora, vio que la forma de la caja se desmoronaba y aumentaba de área, cambiándose de forma.

Finalmente, la luz se apagó y un hombre de aspecto joven se paró frente a ellos.

Tenía los ojos adormecidos y el cabello despeinado.



Sus ropas eran normales y se podían encontrar en cualquier parte, pero lo que llamó la atención de Loren fueron sus ojos adormecidos.

Sus ojos eran púrpuras.

“Uf. ¿Dónde estoy?”

Cuando el hombre con ojos adormecidos se volvió hacia Loren y Lapis, rascándose la cabeza, Loren levantó su gran espada y miró a Lapis.

Lapis captó a Loren mirándola, se dio cuenta de lo que se estaba preguntando y negó con la cabeza.

Sólo los demonios tenían ojos de color púrpura.

Loren creía que un demonio había salido en lugar de un dios maligno y no estaba seguro de si debería sentirse aliviado de que no fuera un dios maligno, o si debería estar preocupado de tener que enfrentarse a un demonio.

Miró a Lapis, preguntándose si era alguien que ella conocía, pero por su respuesta, no parecía que lo fuera.

“No hay respuesta, eh... Lo que sea, supongo que empezaré por encontrar un lugar donde dormir”.

“¿Quién eres tú?”

El hombre, que reprimió un bostezo, perdió interés en ellos y comenzó a alejarse cuando Loren lo llamó.

El hombre abrió la boca para responder a su pregunta, pero después de abrirla y cerrarla repetidamente, finalmente se sentó.

“Demasiado trabajo para responder”.

“¿Eres el dios maligno que el aventurero llamado Volf selló?”

Loren decidió que, dado que había una historia, su pregunta no estaría muy lejos de la verdad, y el hombre se acostó de lado y le respondió, sin siquiera molestarse en mirarlo.

“Sí. Recuerdo que la gente me llamaba el dios Maligno de la Pereza. Había mucha gente tratando de matarme en aquel entonces, era preocupante”.

“Entonces, ¿eres un dios maligno?”

“¿Eso realmente importa? Todo lo que quiero hacer es dormir”.

El hombre se giró hacia Loren y continuó.

“Recuerdo al tipo llamado Volf. Le dejé que me sellara porque dijo que podía dormir todo lo que quisiera. Me pregunto ¿por qué fui capaz de salir?”

“El sello muy probablemente se deterioró con los años”.

Lapis dijo en voz baja.

“No hay tal cosa como un sello que dure para siempre, después de todo. Si pasaran cientos de años, las cadenas se aflojarían”.

“Oh, así que ha pasado mucho tiempo, eh. Entonces supongo que Volf ya está muerto”.

El hombre se levantó y se sentó con las piernas cruzadas.

“Entonces, supongo que eso significa que muchas cosas han cambiado afuera. Mirar alrededor suena divertido. Aunque parezca mucho trabajo”.

“¿Existe la opción de ser sellado de nuevo?”

Loren preguntó por desesperación, pero el hombre negó con la cabeza.

“Al principio pensé que estaría bien ser sellado de nuevo y seguir durmiendo. Pero es bastante incómodo por dentro. Preferiría dormir en una cama suave si pudiera”.

“¡No hay manera de que podamos dejar salir a un dios maligno de aquí!”

Klaus levantó su espada y gritó.

Junto a él, Ange apuntó su bastón hacia el hombre y se preparó para lanzar un hechizo.

Después de mirarlos a los dos, molesto, el hombre volvió su mirada hacia Loren, que todavía no estaba seguro de lo que debía hacer, y Lapis.

“¿Qué hay de ustedes dos?”

“Pregunta difícil. Yo preferiría que te comportaras bien”.

“¿Qué pasa si digo que no quiero?”

“Eso es...”

“Ahh, lo que sea. Escuchar tu respuesta es demasiado problemático”.

Loren pensó que era egoísta por su parte, ya que él fue quien preguntó, pero al hombre no pareció importarle, mientras colocaba un dedo en el suelo y comenzó a escribir algo.

Klaus se movió antes incluso de considerar cuáles eran las acciones del hombre.

Usó << Aumentar >> para cerrar la brecha entre ellos en un instante y balanceó su espada en el cuello del hombre antes de que pudiera reaccionar.

Todos pensaron que la cabeza del hombre volaría con la sangre saliendo por todas partes.

Pero la realidad traicionó sus expectativas, ya que, aunque el golpe de Klaus encontró el cuello del hombre, su espada no se movió más.

“¿¡Qué!?”

“Tus habilidades no son malas, pero tu arma es... Probablemente ni siquiera podrás cortarme las uñas con algo tan contundente como eso”.

Klaus dio un salto hacia atrás, sorprendido de que su golpe ni siquiera hubiera hecho un rasguño.

Al hombre no parecía importarle seguirlo, mientras continuaba escribiendo en el suelo y retiró el dedo cuando hubo terminado.

“Dejaré algo para mantenerlos ocupados, por si acaso, así que diviértanse. Si el destino lo permite, los veré...eso podría ser demasiado problemático, en serio...”

Después de decir eso, el cuerpo del hombre comenzó a hundirse en el suelo.

Aparentemente, estaba pensando en retirarse cuando convocó algo, pero Loren no pudo seguirlo, ya que las palabras que el hombre había escrito empezaron a brillar.

“Dejando la reunión de nuevo a un lado, ¿cómo te llamas?”

Loren le preguntó al hombre, sabiendo que no había forma de detenerlo, y mientras continuaba hundiéndose más profundamente en el suelo, miró a Loren con ojos adormecidos y dijo una última cosa antes de hundirse por completo.

“Dios Maligno de la Pereza, Dauna Slotharcadia. Tengo la sensación de que nos veremos de nuevo”.

Después de esas últimas palabras, se hundió completamente.

Al mismo tiempo, un bulto de color negro, no estructurado apareció desde abajo, como si intercambiara lugares con el hombre.

“¿¡Otro Slime!?”

Mientras Loren gritaba, queriendo un descanso de los Slimes, el gigante de color negro que había sido convocado comenzó a moverse hacia ellos.

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