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The Strange Adventure of a Broke Mercenary C.146

Autor: Main
Traducción al Inglés: Lizz  |  Edición: Xemul
Traducción y Edición al Español: BlackCyan

Capítulo 146: Del Registro a la Disputa

“Oh, Loren. ¿Qué asuntos tienes aquí hoy?”

Sentada detrás del mostrador de recepción del Gremio de Aventureros estaba Ivy, una recepcionista a la que Loren había conocido varias veces antes.

Quería ir a uno de esos otros mostradores con recepcionistas de apariencia capaz; ya que tenía un mal presentimiento sobre este. Pero si se iba ahora, significaría anunciar descaradamente a todos que estaba evitando a Ivy. Por lo que, puso una sonrisa forzada y fue a pararse frente a su escritorio.

Loren había elegido este mostrador por accidente. Todos los demás escritorios tenían aventureros haciendo cola antes que ellos, y mientras esperaba su turno en una de las colas, este mostrador se abrió repentinamente después de haber estado cerrado desde que llegó. Había intentado venir aquí sin ninguna razón en particular, pero se preguntó si Ivy habría abierto su mostrador después de verlo en la otra cola. La miró con recelo. Loren consideraba a Ivy como alguien con quien debía ser cauteloso, pero no estaba seguro de si ella conocía sus pensamientos o no.

Ivy le mostró una sonrisa, ya sea por negocios o simplemente para ser sociable.

“Quiero agregar un miembro a mi party”.

“Oh, ¿finalmente vas a cancelar tu asociación actual?”

Ivy sonaba un poco sorprendida y Loren frunció el ceño ante sus palabras. No entendía por qué ella había mencionado la cancelación de asociación mientras él acababa de decir que quería agregar un nuevo miembro a su party.

Fue Lapis quien respondió a su pregunta.

“Entonces, si agregamos otro miembro a un party de dos miembros, ¿significa que estamos cancelando nuestra asociación?”

“Yo, particularmente. no quiero dejar nuestra asociación”.

Loren respondió, y Lapis esbozó una sonrisa extremadamente feliz.

Ivy los miró con cierto celo y luego volvió su mirada hacia Gula, que estaba esperando a sus espaldas.

“¿Ella es tu nuevo miembro?”

“Así es. Soy Gula. Encantada de conocerte, supongo”.

“¿Gula?”

Preguntó Ivy con una pizca de sospecha en su tono, y Loren temió que los hubieran descubierto de alguna manera. Pero después de reflexionar sobre algo durante un rato, Ivy simplemente desdobló una hoja de papel sobre el escritorio.


“Entonces, por favor completa este formulario. ¿Puedes escribir?”

“No hay problema. Solo déjamelo a mí”.

Gula asintió y pidió prestado una pluma para escribir a Ivy, entonces comenzó a completar el formulario. Loren la estaba mirando y pensando en cómo había hecho exactamente lo mismo en el pasado cuando Lapis le susurró en secreto al oído.

“Loren, ¿tú también hiciste esto antes?”

“Sí. ¿No se registran todos aquí?”

“Bueno, sí. Entonces Loren, puedes escribir”.

La verdad era que leer y escribir era una habilidad en sí misma. Solo unas pocas personas tenían la educación suficiente para poder hacerlo. Loren había sido educado adecuadamente por su compañía de mercenarios, por lo que podía escribir por sí mismo. Su líder había creído que, si uno no podía leer su propio contrato o llenar su propio formulario, entonces no debería haber trabajado como mercenario. Loren solo se había dado cuenta de que su idea no era en absoluto convencional después de renunciar.

“Lapis, no parece que tengas ningún problema con eso”.

“Soy una sacerdotisa, así que, por supuesto, me enseñaron correctamente a leer y a escribir”.

“Gula tampoco parece tener ningún problema”.

Al ver a Gula escribir suavemente su nombre, Loren habló. Al darse cuenta de que Gula estaba a punto de escribir su apellido después de terminar su primer nombre, la tocó ligeramente. Ella lo miró con expresión de desconcierto, pero cuando él tocó el campo de nombre en el formulario, se dio cuenta de que estaba a punto de escribir su nombre completo, el nombre de un Dios Maligno. Sonriendo con ironía, Gula se detuvo en su primer nombre y pasó al siguiente campo.

El siguiente campo era el lugar de nacimiento. Gula lo contempló un momento y luego comenzó a escribir. En ese momento, Loren le preguntó en voz baja:

“¿Qué estás escribiendo aquí?”

“Bueno, mi lugar de nacimiento, por supuesto. Reino de Magia Negra de Nuuna”.

Ivy los miraba susurrar entre ellos con ojos sospechosos. Sin que se diera cuenta, Loren pisó el pie de Gula debajo del escritorio. Cuando ella gritó por el dolor, él usó su mano para cubrir su boca y la apartó con una sonrisa forzada.

A cierta distancia del mostrador, Loren golpeó la cabeza de Gula, que parecía estar a punto de quejarse.

“¿Qué estás haciendo?”

“Eres una idiota. No me digas que no entiendes lo que pasará si escribes el nombre de ese lugar”.

“Ah, cierto. Pero de ahí es realmente de dónde vengo”.

“¿Quieres recibir otro golpe? Puedo servirte unos cuantos puñetazos hasta que tu Glotonería esté satisfecha”.

Loren apretó el puño esta vez. Gula, nerviosa, lo miró. Aun así, no sabía qué escribir.

Pero el propio Loren tampoco sabía mucho sobre los nombres de los lugares, así que miró hacia Lapis, pidiendo ayuda. Lapis suspiró con impaciencia y susurró algo en los oídos de Gula.

Poco tiempo después, Gula pareció haber entendido todo lo que Lapis había intentado decirle. Regresó al mostrador luciendo completamente satisfecha y continuó llenando el formulario.

“Le dije un nombre del lugar más adecuado para usar. Puede parecer sospechoso, pero no tienen los medios para verificarlo, por lo que estará bien”.

Dijo Lapis, mirando a Gula.

Si Lapis dijo que estaría bien, entonces estaría bien. Pero Loren todavía se sentía un poco preocupado, así que preguntó:

“Ella también tendrá que completar la edad y la ocupación, ¿verdad?”

“Le dije que escribiera algo razonable; maga de 21 años de edad”.

Era comprensible que Gula mintiera sobre su edad. Si tuviera que escribir su edad real, sería un número loco entre los cientos. En lugar de eso, Loren estaba un poco sorprendido de que hubieran decidido que Gula tuviera más de veinte años en lugar de una edad más joven como los dieciocho.

“Yo estoy registrada como una sacerdotisa de dieciocho años, por cierto”.

“Esa es una estimación razonable, ¿supongo?”

De acuerdo con Lapis, a pesar de la esperanza de vida más larga, los Demonios aún maduran al mismo ritmo que los humanos, por lo que ese número no era una mentira. Como Lapis era una sacerdotisa del Dios del Conocimiento, uno reconocido oficialmente, no podía mentir sobre una sola cosa en el formulario.

“¿Es tan fácil convertirse en sacerdotisa?”

“Eso es porque soy excelente”.

Lapis dijo con indiferencia. Sin embargo, era excelente, por lo que Loren no tenía nada más que decir.

“¿Y tú, Loren?”

Mirándolo con interés, Lapis preguntó. Loren tardó un poco en recordar lo que había escrito en el formulario.

“Creo que un espadachín de veintidós años”.

“Eso también parece razonable”.

Loren pensó en cómo se había registrado con información bastante vaga.

Había escrito un número que le había parecido apropiado para su edad; la verdad es que en realidad no sabía cuántos años tenía.

Fue un huérfano que había sido recogido por una compañía mercenaria. No sabía su cumpleaños ni la edad que tenía cuando lo encontraron. Otros miembros de la compañía le habían dicho que tuviera esa edad, por lo que se había registrado como tal; el propio Loren ni siquiera sabía si en realidad era mayor o menor.

En cuanto a su lugar de nacimiento, había elegido la República de Portaria.

Había escuchado por el líder de su compañía que era un país aislado en la parte más al norte del continente con poca interacción con otros países. Parecía ser elegido a menudo como el lugar de nacimiento de personas con circunstancias especiales, ya que no se podía verificar nada. Por eso decir que eras de Portaria no era diferente de decir que tenías algo que esconder. En el caso de Loren, dado que no sabía nada sobre su lugar de nacimiento, todavía tenía una excusa incluso si lo atrapaban mintiendo.

“¿También le dijiste a Gula que usara Portaria?”

“Si le dice a la gente que es del norte con esa apariencia, ¿no pensarán que no está bien de la cabeza?”

Por apariencia, Lapis se refería a cómo Gula dejaba al descubierto los hombros y el estómago y ni remotamente parecía que supiera cómo vestirse para el frío. Pero Kauffa estaba en el suroeste del continente y disfrutaba de un clima cálido; vestirse como Gula no haría a uno temblar de frío a menos que fuera invierno.

“Siente más el calor porque viene del norte—también se puede interpretar de esa manera, ¿no?”

“No es como si no hubiera pensado en eso, pero ¿Gula se preocupa realmente por el calor y el frío?”

Loren trató de imaginarse a los Dioses Malignos siendo afectados por el clima como el calor y el frío, pero inmediatamente se rindió—su poder imaginativo no era lo suficientemente alto para eso. Si se apresuraba, todo lo que podía evocar era la imagen de Gula riendo con indiferencia de pie en una tormenta de nieve con ese escaso atuendo.

“Mientras no escriba el nombre de un país que pereció hace mucho tiempo, entonces todo está bien”.

“Así es. No es información importante”.

Al final, Loren y Lapis llegaron a la conclusión de que cualquier país estaría bien. Gula se acercó rápidamente a ellos en ese momento. Parecía que había terminado con el registro; una placa de identificación de cobre colgaba de su pecho.

“El Gremio de Aventureros fue muy tacaño. Alguien tan fuerte como yo debería obtener el rango Hierro como Loren al menos, ¿no creen?”

“Es la regla, así que no hay nada que hacer al respecto. Quiero decir, considerarte como un rango Hierro todavía suena a broma de todos modos, por lo que Cobre o Hierro no importan aquí”.

En cuanto a habilidades, no sería extraño que un Dios Maligno como Gula obtuviera el rango más alto en el sistema de clasificación del Gremio de Aventureros. Pero la regla era que todos los aventureros comenzaran con el rango de Cobre en el registro, y no había excepciones a menos que sucediera algo verdaderamente excepcional. A Gula se le otorgó el rango de Cobre, lo que no fue nada extraño.

En primer lugar, Loren había pensado que Gula no podía clasificarse en rangos como Cobre, Hierro o Plata de todos modos, así que cualquier rango con el que comenzara no importaba. Sin embargo, ella seguía descontenta después de lo que había dicho.

“Quiero estar en el mismo rango que ustedes. Esto se siente como si me estuvieran dejando fuera, ¿no?”

“Subirás bastante rápido de todos modos. Solo aguanta hasta entonces”.

“Dicho eso, ¿estarás dispuesta a trabajar con nosotros cuando subas de rango, Gula?”

Lapis preguntó con su tono también descontento de alguna manera. Y Gula le respondió con una alegre sonrisa:

“Hasta que la muerte nos separe. ¿Está bien que me quede con ustedes?”

“Es un gran problema. Principalmente por los gastos de comida”.

Dijo Lapis con frialdad. Gula hizo una mueca de tristeza mientras se acurrucaba junto a ella, pero esta última la apartó, luciendo realmente molesta.

Loren les instó a que se fueran para discutir su plan de ahora en adelante. No podía decidir si ellas se llevaban bien o no, pero esperaba que al menos no causaran problemas. Mientras lo seguían fuera de la puerta, llegaron los problemas.

“¿Oh?”

“Ah, lo siento”.

Gula se topó con otro aventurero que pasaba por ahí. Gula se disculpó de inmediato, pero el otro aventurero sonrió ampliamente después de verla a ella y a su compañera.

Parecía que la semilla del problema había venido de otra parte. Loren tuvo esa corazonada e involuntariamente se palmeó la cara.

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